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El papel del administrador concursal en los procedimientos concursales

El papel del administrador concursal en los procedimientos concursales

En el complejo mundo del derecho concursal, el administrador concursal desempeña un papel fundamental. Su rol va más allá de la simple gestión de los activos y pasivos de una empresa en concurso; implica un compromiso con la equidad, la transparencia y la recuperación económica de todas las partes involucradas. En este artículo, exploraremos en profundidad el papel del administrador concursal en los procedimientos concursales y su importancia en el proceso de reestructuración.

 

¿Quién es el administrador concursal?

El administrador concursal es una figura neutral y profesional designada por un juez en el proceso de concurso de acreedores. Su misión principal es velar por la igualdad de trato a todas las partes involucradas y garantizar la máxima recuperación posible de los activos de la empresa insolvente.

 

¿Quién puede ser administrador concursal?

Puede nombrarse como administrador concursal todo aquel que tenga conocimientos suficientes para desempeñar correctamente el cargo -normalmente, abogados o economistas con experiencia en la materia- y que no incurra en ninguna de las causas de incompatibilidad o prohibiciones previstas en el Texto Refundido de la Ley Concursal.

De acuerdo con las causas de incompatibilidad previstas en la ley no podrán ser administradores concursales:

  1. Quienes no puedan ser administradores de sociedades anónimas o de responsabilidad limitada.
  2. Quienes hayan prestado cualquier clase de servicios profesionales al deudor o a personas especialmente relacionadas con este en los últimos tres años, así como quienes durante ese plazo hubieran compartido con aquel el ejercicio de actividades profesionales de la misma o diferente naturaleza.
  3. Quienes se encuentren, cualquiera que sea su condición o profesión, en alguna de las situaciones de incompatibilidad previstas en la legislación en materia de auditoría de cuentas, en relación con el propio deudor, sus directivos o administradores, o con un acreedor que represente más del diez por ciento de la masa pasiva del concurso.

 

Asimismo, no pueden nombrarse administradores concursales quienes:

  1. Estén especialmente relacionados con alguna persona que haya prestado cualquier clase de servicios profesionales al deudor en los tres últimos años o a personas especialmente relacionadas con éste.
  2. Aquellas personas que se nombren discrecionalmente para cualquiera de esos cargos por el mismo juzgado o por el mismo juez en tres concursos dentro de los dos años anteriores contados desde la fecha del primer nombramiento.
  3. Quienes hayan sido separados del cargo dentro de los tres años anteriores, ni quienes se encuentren inhabilitados por aplicación de lo dispuesto en esta ley.
  4. Quien en la negociación de un plan de reestructuración hubiera sido nombrado experto en la reestructuración.

 

Funciones del administrador concursal

  1. Gestión de la empresa en concurso: El administrador concursal toma el control de la empresa en concurso, asegurando que las operaciones comerciales continúen de manera eficiente y que los activos no se dilapiden. Esto implica una supervisión cercana de la situación de la concursada y la toma de decisiones clave en beneficio de la sociedad.
  2. Elaboración de un informe inicial: Uno de los primeros pasos que debe llevar a cabo el administrador concursal es la elaboración de un informe inicial que incluye un análisis de la situación financiera de la empresa y una evaluación de las propuestas de convenio, en su caso o el plan de liquidación. Este informe proporciona una base sólida para la toma de decisiones durante el proceso concursal.
  3. Negociación y mediación: En muchos casos, el administrador concursal actúa como mediador entre los acreedores y la empresa en dificultades. Su experiencia y conocimiento legal permiten la búsqueda de soluciones amigables y la negociación de convenios que beneficien a todas las partes involucradas.
  4. Liquidación de activos: Si la reestructuración no es viable, el administrador concursal supervisa la liquidación de los activos de la empresa. Esto implica la venta de inmuebles, maquinaria y otros activos para satisfacer las deudas pendientes de los acreedores.
  5. Información y transparencia: El administrador concursal debe mantener a todas las partes debidamente informadas sobre el progreso del proceso concursal. La transparencia en todas las etapas es esencial para generar confianza y garantizar la equidad.

 

El papel del administrador concursal en los procedimientos concursales

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